
Historia
La Beata María Victoria Fornari nació en Génova en 1562, en una familia noble y profundamente cristiana. Desde niña mostró un corazón dócil y piadoso, con inclinación a la oración y a las obras de caridad. Su vida parecía encaminarse al matrimonio, y obedeciendo a sus padres, a los 17 años contrajo matrimonio con Ángel Strata, un noble de carácter bondadoso. Ambos esposos vivieron en perfecta armonía, entregados a Dios y al cuidado de sus hijos12 de septiembre, Beata Maria V….
El matrimonio fue bendecido con seis hijos, que al llegar al mundo eran ofrecidos a Dios y a la Virgen. Pero esta dicha terrenal se truncó cuando, en 1587, Ángel Strata murió de manera repentina, dejando viuda a María Victoria con solo 25 años y madre de cinco pequeños, estando embarazada del sexto. Ante el dolor y la incertidumbre, acudió a la Virgen María, Consoladora de los Afligidos, y experimentó una visión: la imagen de la Virgen cobró vida, extendió sus brazos y le dijo: “Victoria, hija mía, no temas; yo cuidaré de ti y de tus hijos”.
Consolada y fortalecida, María Victoria hizo voto de castidad perpetua y se consagró enteramente a Dios. Desde entonces llevó una vida mortificada, sencilla y penitente, dedicada a la oración, al cuidado de sus hijos y a los pobres de Génova. Iba de palacio en palacio pidiendo limosna para los necesitados, acogía enfermos en su propia casa y buscaba rescatar a quienes se hallaban en vicios, movida por una ardiente caridad12 de septiembre, Beata Maria V….
Su vida estuvo acompañada de grandes pruebas. La muerte de uno de sus hijos, Alejandro, a los diez años, fue ocasión de gracia: el niño, consumido por las llagas, murió sereno tras recibir la Eucaristía, anunciando a su madre que la Virgen y los ángeles venían a llevarlo al cielo. Lejos de derrumbarse, María Victoria vio en ello un signo del amor de Dios y de la certeza de que sus hijos serían todos consagrados al Señor12 de septiembre, Beata Maria V….
En 1604, animada por el jesuita Bernardino Zanoni, fundó la Orden de la Anunciada Celeste, bajo la regla de San Agustín y con aprobación del papa Clemente VIII. Fue nombrada superiora de la primera comunidad, formada por mujeres deseosas de vivir la pobreza, la oración y la devoción mariana. La Virgen confirmó su obra con signos extraordinarios, asegurándole que sería la madre y protectora de todas sus religiosas12 de septiembre, Beata Maria V….
Durante sus años como fundadora y religiosa, fue modelo de austeridad, humildad y caridad. Soportó enfermedades, tentaciones y humillaciones con paciencia, buscando siempre conformarse con Cristo Crucificado. Tenía gran amor a la Eucaristía y mortificaba su vida por amor a Jesús Sacramentado. En medio de sus sufrimientos, repetía: “Si se contemplase debidamente la Pasión de Cristo, uno moriría de amor”12 de septiembre, Beata Maria V….
El 15 de diciembre de 1617, a los 55 años, entregó su alma al Señor después de recibir los sacramentos y pronunciar los dulces nombres de Jesús y María. Su cuerpo fue hallado incorrupto y su tumba se convirtió en lugar de milagros y gracias. Fue beatificada en 1828 por el Papa León XII12 de septiembre, Beata Maria V….
Hoy, la Orden de las Anunciadas Celestes continúa su misión mariana, recordando a la Iglesia que la santidad puede florecer en cualquier estado de vida: como esposa, madre, viuda o religiosa, cuando todo se entrega a Cristo bajo la mirada de la Virgen.
Lecciones
1. La confianza en María nunca defrauda: en su viudez y soledad encontró consuelo en la Madre de Dios, que la protegió siempre.
2. La santidad en el matrimonio y en la viudez: vivió como esposa fiel, madre ejemplar y después como viuda consagrada a Dios.
3. Caridad sin límites: acogió enfermos, ayudó a pobres y buscó la conversión de los más alejados.
4. La cruz como camino de amor: sus sufrimientos, mortificaciones y pruebas se transformaron en ocasión de unión con Cristo.
“Beata María Victoria Fornari: madre y viuda fiel, fundadora mariana, nos enseña que la santidad se alcanza confiando en la Virgen y entregando cada dolor y alegría al Corazón de Cristo.”